“En Turre algunos se han dedicado a llevarse el dinero”

El alcalde Martín Morales denunciará a excargos públicos municipales del PSOE ante la Fiscalía por su gestión entre 2008 y 2011 si se confirma que pudieron cometer prevaricación y malversación de fondos 

Martín Morales (izda) recibe el bastón de alcalde de manos de su predecesor en el cargo, Arturo Grima

Inmaculada G. Mellado / 05·10·2015

El alcalde Martín Morales avanza que denunciará a excargos públicos municipales del PSOE ante la Fiscalía por su gestión entre 2008 y 2011, siempre que un organismo público confirme que pudieron cometer prevaricación y malversación de fondos, tal y como sugiere una auditoría externa encargada por el PP y conocida poco antes de las elecciones municipales de mayo. El regidor, líder de la coalición de Somos Turre y que gobierna gracias al apoyo de los socialistas, responde así al órdago de su antecesor, el popular Arturo Grima, que es directo a la hora de acusar: “Si el bolígrafo cuesta un euro y lo pagas a cuatro, pienso que la diferencia te la has llevado y ya está”.

 “No taparé las vergüenzas del PSOE”. Así ha respondido al órdago del exalcalde de Turre, Arturo Grima (PP), su sucesor, Martín Morales (Somos Turre), que avanza que llevará ante la Fiscalía la gestión de los socialistas que dirigieron el Ayuntamiento durante los años 2008 y 2011 –hoy otros miembros del PSOE son sus socios de Gobierno- de confirmar los servicios municipales que pudieron incurrir en presuntos delitos de prevaricación y malversación de fondos, tal y como sugiere el estudio económico y de gestión encargado por los populares durante el pasado mandato y cuyos resultados fueron conocidos por la Corporación –que no presentados a la prensa- poco antes de las elecciones del pasado mes de mayo.

La decisión de acudir a la Fiscalía la tomaría Morales aunque le costase perder el apoyo del PSOE, con quien pactó la Alcaldía durante los dos primeros años del mandato. “Yo no he hablado de esto con mis socios de gobierno socialistas, pero tendría la responsabilidad de hacerlo, no me quedaría otra”, afirmó el nuevo regidor en los micrófonos de RADIO ACTUALIDAD.

Ahora bien, antes de nada, Morales esperará a lo que digan bien los servicios jurídicos municipales o los de la Diputación Provincial. “Antes de fiarme de ese estudio, que es externo, he pedido asesoramiento dentro de la propia administración pública y si me dicen que esas actuaciones pueden ser constitutivas de delito, entonces pasaré toda la información al fiscal, pero yo no voy a seguirle el paso a Arturo Grima, porque el informe lo tiene desde marzo o abril y tuvo tiempo de denunciar siendo alcalde”, asevera Martín Morales.

La respuesta de Morales la supo Grima, quien ganó las elecciones con mayoría simple, por RADIO ACTUALIDAD, y no en el pleno donde el exregidor esperaba exponer y debatir más de 20 ruegos y preguntas que llevaba preparados, entre ellos, precisamente, uno relativo al ‘Diagnóstico económico financiero de la hacienda municipal y control de legalidad’. De la sesión ordinaria, celebrada el pasado 16 de septiembre, se marchó el grupo popular ante la actitud “dictatorial” del alcalde, “que quiso taparnos la boca”.

Cree Grima que Morales le encomió brevedad para evitar hablar de su falta de gestión durante los primeros cien días de gobierno y también para no responder de los presuntos delitos que habrían cometido los socialistas, hoy convertidos en sus socios de gobierno aunque representados con gentes nuevas. “Él no deja hablar para seguir siendo alcalde y al PSOE le conviene que no se lleve a la Fiscalía, pero se va a llevar”.

Arturo Grima es directo a la hora hacer acusaciones y también adjetivar la “pésima y miserable” gestión del grupo de gobierno socialista que dirigió el Ayuntamiento turrero entre 2008 y 2011, precisamente tras una moción de censura que lo desbancó de la Alcaldía tras apenas seis meses de mandato. “Si el bolígrafo cuesta un euro y lo pagas a cuatro, pienso que la diferencia te la has llevado y ya está”.

Entre esas actuaciones que podrían ser constitutivas de delito -según el estudio de gestión encargado por el PP- y que habrían dejado el Ayuntamiento en la “más absoluta de las miserias”, el exregidor destaca los 300.000 euros de subvención que se recibieron para construir un pabellón que nunca se hizo “pero que sí se gastaron y ahora se están devolviendo con intereses”. “Tampoco hay que ser un Séneca –añade- para ver que no es normal que se adjudique el servicio de limpieza a Urbaser por 560.000 euros cuando los informes municipales decían que otra empresa podía hacerlo más barato; de hecho al Ayuntamiento le estaba costando 250.000 euros”.

Hacer un “descubierto de 108.000 euros la noche antes de dejar la Alcaldía” o “gastar 34.000 euros del Plan E de Zapatero que no se podían tocar” son otros de los “gastos sin explicación” de la etapa de los socialistas Francisco Ortega y Rodrigo Sánchez por los que el jefe de la oposición estima que ha llegado el momento de pedir cuentas.

“Todo esto ha repercutido en el funcionamiento del Ayuntamiento, que está en la más absoluta de las ruinas, porque se han dedicado a gastar, a tirar y algunos a llevarse. No sé a qué tiene que seguir esperando el alcalde, cuando ya hay un informe que ha costado 12.000 euros y que está firmado por catedráticos de la Universidad de Granada”.

El diagnóstico de gestión era sólo uno de la veintena de asunto que planteaba el PP transcurridos cien días desde que Somos Turre –con dos concejales- y el PSOE –con cuatro- iniciaran un gobierno conjunto que les llevará a alternar la Alcaldía durante 20 y 28 meses, respectivamente.

Los presupuestos, el “deficiente” servicio de limpieza, la deuda de Galasa, la calidad del agua de abastecimiento o el eterno proyecto de remodelación de la avenida de Almería eran algunos de los muchos asuntos por los que los populares querían inquirir al bipartito. Pero el portavoz del PP sólo planteó uno de los ruegos, el primero, en el que solicitaba información sobre “las actuaciones llevadas a cabo para la mejora del servicio de abastecimiento de agua potable”. Al impedirle el primer edil una segunda intervención sobre el mismo tema, Grima decidió marcharse junto a sus cuatro concejales.

“Yo, cuando era alcalde, le dejaba intervenir una, dos y tres veces. ¡Se le llena la boca de democracia y mira!”, declaraba con enojo Arturo Grima, quien, no obstante, avanza que no volverá a irse de un pleno: “De aquí en adelante aguantaremos hasta el final. Va a tener que cambiar el chip”.

El panorama es bien distinto para Martín Morales, que mantiene que su antecesor lo que trato de dar fue un “auténtico mitin”. “Alguien lo cronometró y en su primera exposición empleó más de trece minutos. ¡Imagínese con veinte ruegos! Si el señor Grima quiere dar discursos yo no tengo inconveniente en dejarle la plaza del pueblo o el edificio de usos múltiples, algo que, por cierto, él nunca hizo conmigo”, explica la primera autoridad del municipio, que, tras marcharse los ediles del Partido Popular, respondió, una a una, a las más de veinte cuestiones formuladas por la oposición.

Además, volverá a hacerlo en un pleno extraordinario convocado a petición del PP para el 30 de septiembre, coincidiendo con el cierre de la edición de este periódico.

  

Rodrigo Sánchez responde: “Lo de Arturo es puro circo”

  

“Arturo Grima lo que debe hacer es ir al juzgado si cree que tiene algo que denunciar, de hecho ha tenido cuatro años para hacerlo”, responde el exedil socialista Rodrigo Sánchez. El hoy parlamentario andaluz cree que el exalcalde sólo busca “circo y espectáculo” para no dejar al nuevo gobierno que gestione el Ayuntamiento al que “el propio Grima ha endeudado en 4 millones de euros” durante el mandato anterior.

“Él sabe que las decisiones que nosotros tomamos se fundamentaban en informes favorables. Lo que no dice es que el estudio que encargó lo tiene desde 2013 y que nadie lo firma”, concluye Sánchez.

“Ni pío dice” –la expresión es de Grima-, el actual PSOE, pese a los numerosos intentos de este medio de comunicación por conocer su opinión acerca de éste y otros asuntos de la actualidad turrera.

Los nuevos socialistas son jóvenes, sin experiencia política y parece que con insuperable temor escénico a comparecer en un medio de comunicación. Ni siquiera lo hicieron durante la campaña.