El PP está dispuesto a gobernar en solitario la Mancomunidad si los socialistas no retornan

Los representantes del PSOE, que abandonaron la última sesión, anuncian que no acudirán a los plenos hasta que los populares acepten elegir al presidente de acuerdo a lo marcado por los estatutos 

Representantes de los municipios que integran la Mancomunidad. En el centro los alcaldes de Huércal Overa, Domingo Fernández, y Lubrín, Domingo Ramos

Miguel Ángel Sánchez / 19·12·2015

Los representantes del PSOE, que abandonaron la última sesión, anuncian que no acudirán a los plenos hasta que los populares acepten elegir al presidente de acuerdo a lo marcado por los estatutos Reprochan al PP su negativa a negociar cuando los candidatos de ambos partidos contaban con idéntico número de votos y que se nombrara para dirigir la Institución al regidor huercalense Domingo Fernández.

Los resultados de los últimos comicios locales celebrados el 24 de mayo dibujaron un nuevo mapa político en la comarca en el que los socialistas recuperan gran parte del terreno perdido en anteriores comicios. 

Si en el mandato 2011-2015 el Partido Popular dirigía 11 de los 14 ayuntamientos que integran la Mancomunidad -Carboneras, Mojácar, Turre, Garrucha, Antas, Vera, Cuevas del Almanzora, Pulpí, Taberno, Sorbas y Huércal Overa, frente a los socialistas de Lubrín, Bédar y Los Gallardos-, en el presente 2015-2019 las cosas han cambiado significativamente. Tanto que el PP gobierna sólo o en coalición en 7 municipios –Carboneras (pacto con Gicar), Mojácar, Antas, Pulpí, Taberno, Sorbas y Huércal Overa- y el PSOE en otros 7 –mantiene Lubrín, Bédar y Los Gallardos y añade Garrucha, Turre (pacto con Somos Turre), Vera (pacto con el Partido Andalucista) y Cuevas del Almanzora (pacto con Ciudadanos). 

El efecto de estas sumas en el plenario de la Mancomunidad, compuesto por 28 miembros, es un empate. La situación quedó claramente escenificada el 3 de agosto pasado, cuando los munícipes fueron convocados para la celebración del Pleno de Constitución y la elección del nuevo presidente, obteniendo 14 votos la candidata del PSOE, la alcaldesa garruchera María López, y otros 14 el aspirante del Partido Popular, el alcalde de Huércal Overa Domingo Fernández, que optaba a la reelección. 

Ante la paridad de fuerzas, fue precisa hasta una tercera votación para que Fernández se alzara finalmente con la Presidencia, hecho que ocurrió entre los reproches de los socialistas. 

“Hemos querido negociar pero no ha sido posible”, contaba por aquellos días el portavoz del PSOE y alcalde de Lubrín, Domingo Ramos. “Dada la igualdad de votos, propusimos dos años de Presidencia para cada uno, pero el PP se negó”. 

Opinión distinta tenía de lo acontecido el recién elegido presidente. Para Domingo Fernández “se hizo lo que marcan los estatutos cuando hay empate. Se siguió lo que dice el reglamento, es decir, que el grupo con más representación es quien decide”. Añadió que, si bien los socialistas sugirieron posponer la designación hasta septiembre, “jurídicamente era imposible” porque “de ese pleno tenía que salir necesariamente un presidente”. 

Acaba el consenso 

De esta forma se rompía el consenso que desde sus inicios ha disfrutado el plenario de la Mancomunidad no sólo en la elección de presidente, sino en todos y cada uno de los asuntos que han sido debatidos en las distintas convocatorias que vienen celebrándose desde que el ente público fuera fundado el 14 de mayo de 2004, en un solemne acto organizado en el Convento de los Mínimos de Vera. 

Pero la discrepancia del 3 de agosto pasado, que apuntaba a una polémica puntual, no parece haber agotado su recorrido. De hecho las diferencias se han acentuado hasta el punto de poner en riesgo el normal funcionamiento de la Institución supramunicipal. 

El viernes, 4 de diciembre, se convocaba el segundo pleno del presente mandato. Ya desde el primer momento se evidenció que aquello no iba a terminar bien. Durante la lectura del acta de la sesión anterior, la del pleno de la constitución, los representantes del PSOE y los partidos que le apoyan mostraron su disconformidad con la descripción de lo acontecido el 3 de agosto, día en el que el PP sacó adelante el nombramiento de su candidato a presidente. El pasado 4 de diciembre los socialistas rechazaban tanto la forma, es decir, los términos en que el acta recogía sus intervenciones, como el fondo, la base jurídica en que se apoyan los populares para seguir dirigiendo la Institución. En este sentido expresaron que siendo cierto que ante un empate se alzará con la Presidencia el candidato del partido con mayor número de representantes, “aquel 3 de agosto aún no se habían constituido los grupos políticos en los ayuntamientos y, por tanto -recuerda el alcalde de Lubrín y portavoz de su grupo, Domingo Ramos-, oficialmente, ninguno de los presentes actuaba en nombre del partido por el que había sido elegido”. Esto suponía “tal y como advertimos entonces, un empate, de ahí que pidiésemos o bien posponer la elección hasta septiembre, o bien acordar un reparto de la Presidencia dos años para cada uno”. 

Sea como fuere, lo cierto es que esta segunda convocatoria plenaria no pasó de la lectura del acta de la sesión anterior, que ni siquiera llegó a ser aprobada por el PSOE, cuyos miembros y los de los demás partidos con los que cogobierna en varios de nuestros ayuntamientos optaron por abandonar la sala con el firme propósito de no volver “hasta que las cosas se hagan de acuerdo a los estatutos”. 

Este abandono del pleno de la Mancomunidad tuvo una segunda consecuencia. La sesión hubo de suspenderse por falta quórum. Los del PP no sumaban el número mínimo para seguir adelante, un tercio del total de miembros. Faltaron los dos representantes de Sorbas, la teniente de alcalde de Huércal Overa Maribel Sánchez, y un representante de Carboneras y otro de Mojácar. 

Tampoco en el otro bando, el de los socialistas, las fuerzas estaban completas. El alcalde de Turre, Martín Morales –Somos Turre- no pudo asistir al pleno, tampoco el alcalde de Cuevas del Almanzora, Antonio Fernández. 

“Gobernaremos solos” 

El presidente de la Mancomunidad, el huercalense Domingo Fernández (PP), no aplaude el abandono de los socialistas: “No me causa ninguna satisfacción”, señaló al ser preguntado por ACTUALIDAD ALMANZORA. Pero tampoco se mostró muy dispuesto a repetir la elección que acabó poniéndole al frente de la órgano supramunicipal. 

“Se hizo lo que marcan los estatutos. Así lo entendió la secretaria y el propio presidente de la mesa constituyente, el alcalde de Vera, Félix López (PA), que gobierna en coalición con el PSOE. Por eso no entiendo muy bien a qué viene ahora esto de discutir una decisión que fue acordada en su día a instancias del propio Félix López que, ante el empate, argumentó que era el PP el partido que mayor número de votos había sacado en el ámbito de la Mancomunidad -3.000 más que el PSOE- y que, como consecuencia, contaba con más representantes que nadie en el pleno, lo que recomendaba que el presidente fuera su candidato”, subraya Fernández, quien añadió que “lo que no se puede pretender ahora es retorcer unos estatutos que marcan lo que marcan y que fueron aprobados hace 11 años por todos los partidos políticos de la comarca”. 

Al respecto adelantó que se están preparando unos nuevos estatutos que, “de acuerdo a la nueva ley”, atribuirán a los representantes de la Mancomunidad un número de votos acorde al de vecinos del municipio que representan. Esto, a juicio de Domingo Fernández, “dará a los integrantes del plenario de la Mancomunidad una representatividad más justa y acorde con lo que cada pueblo aporta a las arcas de la Institución, que quedó establecido en función del número de habitantes”. 

En cualquier caso, “si el PSOE insiste en no venir a los plenos, el grupo popular reúne al número de miembros suficiente para que se alcance el quórum y la Mancomunidad pueda tomar decisiones. Gobernaremos solos”. Si embargo Fernández no descarta un acercamiento de posturas. El PP tiene 14 representantes y el PSOE 12 más los alcaldes de Vera (PA) y Turre (Somos Turre). El veratense Félix López y el turrero Martín Morales “ya me hicieron saber desde el primer momento, nada más ser yo elegido, que contara con ellos, que aunque el 3 de agosto votaron a la candidata del PSOE, a partir de ese momento estarían conmigo y trabajarían para que la Mancomunidad no perdiera el espíritu de consenso que siempre la ha caracterizado”. 

De otra parte, lamenta el presidente que la decisión de los socialistas de marcharse “obligó a suspender el pleno y dejar sobre la mesa la aprobación de una propuesta muy interesante para informatizar en unos casos, y ampliar o incorporar en otros, servicios municipales. Se trataba de solicitar a la Unión Europea con cargo a los fondos Feder, más de 1 millón de euros en el marco del proyecto Smart Cities o Ciudades Inteligentes. Con ello se colocarían en nuestros pueblos sensores para medir la calidad del aire y el agua de las playas, también el agua de nuestras fuentes, medir el tráfico de nuestras carreteras, crear zonas wifi o incorporar aplicaciones informáticas para guías turísticas”. 

“Votación correcta” 

Pero volviendo al asunto que ha distanciado a los dos principales partidos de la comarca, la elección del presidente de la Mancomunidad, Domingo Fernández, avanza que “no hay lugar a nuevas consultas sobre los estatutos porque la votación fue correcta”. Es más, añade que “en el hipotético caso de que se hiciera, la ganaríamos y el PSOE no habría conseguido nada, sólo entorpecer”. 

No comparte esta opinión el portavoz socialista Domingo Ramos. “No es cuestión de quién conseguirá alzar a su candidato hasta la Presidencia de la Mancomunidad, sino de hacer las cosas correctamente. Lo que no estamos dispuesto es a respaldar un acto que jurídicamente es contrario a los estatutos”. 

Pese a todo, el actual presidente se pregunta que si todo es cuestión de seguir los estatutos al pie de la letra, “asunto que no quiero trivializar sino de darle toda la importancia que tiene, podríamos poner sobre la mesa qué municipios están al día en el pago de sus cuotas y, de no ser así, si sus representantes tienen derecho a voto”. 

Concluyó diciendo que desde que dirige la Mancomunidad en este nuevo mandato ha estado actuando como presidente en actos como la entrega de los distintivos de calidad turística Sicted “sin que nadie haya puesto el más mínimo reparo”. Y no sólo eso, los propios alcaldes de Vera y Turre “me llamaron para que incluyera en el orden del día de la sesión del pasado 4 de diciembre propuestas para la creación de una línea de transporte público que afecta directamente a sus municipios”. 

Cinco meses y tres desencuentros 

En los primeros cinco meses de mandato, populares y socialistas han protagonizado tres sonoros desencuentros. Al ya citado de la Mancomunidad, se suman los ocurridos en Galasa y en el Consorcio de recogida y tratamiento de basuras. 

1- La elección del presidente del Consorcio de Basuras, el pasado 16 de septiembre, fue tildado de “pucherazo” por el PSOE. Los socialistas advirtieron que se estaba cometiendo “una ilegalidad”, puesto que el PP impuso a su candidato Antonio Martínez Pascual, alcalde de Olula del Río, saltándose los preceptos que marcan los estatutos. Martínez recibió el apoyo de 24 municipios más la Diputación (total 25), frente a los 21 del candidato socialista. 

La “cacicada”, como califica el PSOE la elección del presidente, consistió, basándose en un informe externo “hecho por un abogado que es el hijo del anterior gerente del Consorcio”, en no permitir el voto ponderado de los alcaldes, es decir, votar en función del número de habitantes que representaban –que daba la mayoría a los socialistas- y emplear el sistema de un alcalde/municipio un voto, que daba la mayoría al Partido Popular. Es definitiva, el PSOE gobierna menos municipios pero más población y el PP menos población pero más municipios. 

Lo curioso del caso, destaca la titular de Política Local de la ejecutiva provincial del PSOE, Adela Segura, es que en un primer punto del orden del día se aprobó el voto ponderado y a continuación, en el segundo punto que recogía la designación de presidente, “deciden la tropelía de que la elección se haga en los términos de un municipio un voto”. El asunto está en manos de los tribunales (ver noticia apoyo en esta misma página). 

2- A lo anterior hay que sumar las disputas que el Ayuntamiento de Albox -gobernado por un gobierno que se presentó a las elecciones bajo las siglas del PSOE, pero que actualmente conforma provisionalmente el grupo mixto a la espera de una sentencia definitiva que condene o absuelva al alcalde de un delito por denegar información a la oposición- mantiene con el Consorcio por el cobro de una nueva tasa mensual por depositar las basuras de todos los pueblos en el vertedero del municipio. El importe asciende a 600.000 euros anuales que el Consorcio se resiste a pagar. 

3- El tercer hecho tuvo lugar en julio, durante la celebración de la primera Junta de Accionistas de Galasa tras los comicios de mayo, en la que se eligió a los nuevos integrantes del consejo de administración y a su consejero delegado, el huercalense Antonio Lázaro. 

Fue el alcalde de Arboleas, el socialista Cristóbal García, quien en un ambiente aparentemente distendido tomó la palabra para expresar que observaba “opacidad” en la gestión de la empresa pública de abastecimiento. Aquello generó malestar en las filas del PP, que de inmediato por boca del presidente de la Diputación, Gabriel Amat, y con mayor contundencia verbal por parte del vicepresidente, Javier Aureliano García, afearon la actitud de Cristóbal García. La reunión acabó en un intercambio de reproches. 

Declaró días después Javier Aureliano a este medio que “no era el momento de acusar al anterior consejero delegado –el cuevano Antonio García- de haber mantenido una gestión opaca, y más aún cuando el alcalde de Arboleas negaba estar en conocimiento de una información que tenía en su cajón desde hacía meses”. 

Por su parte el regidor arboleano contó que se limitó a preguntar en voz alta “cómo es posible que Galasa vendiese a la empresa estatal Aguas de la Cuenca de Sur –que desarrolla el programa de desaladoras- unas instalaciones que más tarde la propia Acusur arrendó a Galasa”. 

El Consorcio de basuras debería volver a votar presidente, según la Fiscalía 

La Fiscalía de Almería ha considerado que la elección de cargos políticos para la dirección del Consorcio de Residuos Almanzora-Levante-Los Vélez privó a varios alcaldes de acceder “en condiciones de igualdad a los cargos” que se iban a designar, entre ellos el del presidente. 

El fiscal, en un escrito dirigido al titular del juzgado número 3 de los contencioso administrativo de Almería, entiende que se “vulneró un derecho fundamental”. 

El Ministerio Público se pronuncia en esos términos tras la demanda presentada por el PSOE, que defiende su prerrogativa a designar al presidente, frente a la posición de los representantes del Partido Popular, que fueron quienes finalmente consiguieron hacerse con los puestos en liza. 

Si la designación se hubiese hecho a través del voto ponderado, es decir, de acuerdo al número de vecinos que tiene cada municipio, el candidato socialista, Cristóbal García, regidor de Arboleas, habría obtenido 785 votos, mientras que el aspirante del PP, el primer edil de Olula, Antonio Martínez, que fue finalmente elegido, habría reunido 726 apoyos. 

No fue el voto ponderado el que se usó, sino el de un municipio un voto. Con esta suma, el socialista obtuvo 21 votos y el popular 25. El PP gobierna más pueblos pero menos población y los socialistas menos municipios pero mayor número de vecinos. 

Ahora será un juzgado el que aclare las cosas, si bien la Fiscalía ya se ha pronunciado respaldando la tesis del PSOE. El sistema que se aplicó fue el “de voto por persona y no el del voto ponderado, como señala en sus estatutos” el Consorcio. De esta forma, el fiscal cree “procedente” la estimación del recurso presentado por los socialistas “al no resultar justificado el sistema de elección impuesto”.

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