Malestar generalizado entre los distintos agentes sociales de la comarca ante la baja temeraria con que se ha resuelto la adjudicación del único tramo otorgado en la provincia de Almería. En el mejor de los casos, prefieren no contestar
Javier Irigaray / 05·08·2015
El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF),
ente público que gestiona las obras del AVE, ha adjudicado a la empresa Sacyr
las correspondientes al tramo que discurrirá entre Cuevas del Almanzora y Pulpí
por 33 millones de euros. El precio base de licitación era de 71,2 millones.
La consignación de las obras del tramo de la línea de alta
velocidad Murcia-Almería comprendido entre las localidades de Pulpí y Cuevas
del Almanzora ha disparado la alarma y la indignación entre los propietarios de
maquinaria de la comarca. La empresa agraciada ha sido la constructora Sacyr,
que lo ha conseguido pujando con 33 millones de euros, lo que supone una rebaja
de casi el 54% sobre el presupuesto inicial barajado por el Ministerio de
Fomento, que era de 71,2 millones. Así, una infraestructura cuya ejecución
esperaban los subcontratistas de la comarca como “agua de mayo”, mucho se temen
que pueda convertirse en auténtica “granizada”.
El presidente de AESOM, la asociación que agrupa a las
empresas del sector, Jerónimo Parra, admite con rabia que “esa baja temeraria
nos tocará pagarla a los subcontratistas, aunque, luego, la rebaja no es tanta.
Hay obras del AVE a Extremadura que llevan más de año y medio adjudicadas y no
comienzan porque el gobierno se niega a aprobar todos los ‘modificados’ que
piden las empresas”.
Las modificaciones sobre los proyectos y, por tanto, el
importe de los presupuestos en que se adjudican las obras son una costumbre que
Parra denuncia: “Es una vergüenza que haya más gente trabajando en los
servicios jurídicos de las grandes empresas que en sus equipos técnicos, porque
buscan más un fallo en el proyecto que justifique la modificación
presupuestaria, que defender con honestidad la ejecución de la obra”.
“Realizar una obra con una baja del 54% -añade Parra- es
materialmente imposible. Un jefe de obra de Sacyr me dijo literalmente que
ejecutar el movimiento de tierras de su obra le iba a suponer ‘arruinar a tres
o cuatro empresas de maquinaria’, o sea “a tres o cuatro de nosotros. Eso es lo
que piensan y no todos se atreven a decir”.
“Si es posible realizar una obra con tamaña rebaja sobre el
proyecto –afirma el representante de los subcontratistas-, existe una
responsabilidad que habría que exigir a la empresa redactora del proyecto y a
los servicios técnicos del Ministerio”.
Parra acusa: “La baja temeraria con que Sacyr ganó el
contrato del Canal de Panamá nos va a costar a todos los españoles los 600
millones de euros con que el gobierno la avaló. Estas prácticas, que aquí son
moneda común, fuera no las admiten. Y no hablo de Alemania, sino de Marruecos,
Panamá o Paraguay, países que obligan al cumplimiento de los contratos y de la
ley y que demuestran ser más serios en esos aspectos que el nuestro, por mucho
que duela decirlo”.
“Es triste –concluye- para las empresas de maquinaria de la
zona, que estamos esperando estas obras como agua de mayo, que al final se nos
conviertan en granizo, porque, si nos ‘acercamos’, sólo podemos salir dañados.
Ha sido una muy mala noticia, por mucho que habrá políticos que intentarán
mostrarla como un gran logro”.
Por su parte, el diputado nacional Jesús Caicedo rehusó
hacer valoraciones. “Yo no conozco la información y, por tanto, no puedo entrar
a evaluarla. Es una cuestión técnica que se me escapa. Los políticos no
entendemos de bajas ni de altas, eso son aspectos que tienen que establecer los
ingenieros que informan en los procedimientos de adjudicación y bajo cuyos
dictámenes se resuelven las licitaciones, a partir de ahí, yo no puedo valorar por
qué se ha resuelto la licitación de esta manera”.
Caicedo sí quiso comentar el revuelo suscitado en torno a la
no inclusión de ninguna partida para la alta velocidad en Almería en los
presupuestos que se están elaborando para el próximo ejercicio. “Primero, hay
que decir que no están aún terminados y, segundo, lo importante no es que se
incluyan partidas, sino que el dinero se gaste. El papel lo aguanta todo y se
harta uno de millones de euros presupuestados en obras que, cuando acaba el
año, no se han ejecutado. Yo he visto llevar un millón de kilos en una
bicicleta ¿sabe usted cómo? En un bolsillo, apuntados en un papel”.
En cambio, Javier Aureliano García, el secretario General de
los populares almerienses, se mostraba más contundente: “No vamos a tolerar que
la conexión con la Alta Velocidad se demore más de lo necesario, porque éste
también era nuestro compromiso con los almerienses, Adif tiene que empezar de
inmediato las obras de este tramo porque ése es el compromiso que está aprobado
por el Consejo de Ministros”.
Reconoció el líder de los populares almerienses que
“han sido unos años muy complicados, en los que las inversiones han estado
supeditadas a la situación económica del país y donde la prioridad ha sido
garantizar el Estado de bienestar y sacar a España de la crisis”, pero añadió
que “fue un Gobierno del PP el que incluyó a Almería dentro de la red de Alta
Velocidad y será con un Gobierno del Partido Popular cuando el AVE llegue a
nuestra provincia".
También se mostraba explícito el secretario general de los
socialistas almerienses, José Luis Sánchez Teruel, para quien habría que
“garantizar que gobierne quien gobierne el AVE cuente con partidas
presupuestarias anuales que permitan que esa infraestructura se ejecute y se
ponga en servicio en una determinada fecha”.
Y, dicho lo anterior, Sánchez Teruel sostuvo que “el PP no
ha hecho nada en cuatro años. Terminó los tramos que comenzaron a ejecutarse
cuando gobernaba el PSOE y, ahora mismo, el de Almería es el AVE a ninguna
parte, porque una línea entre la Venta del Pobre y un paraje entre Vera y Los
Gallardos no ofrece la posibilidad de conectarnos con el Corredor Mediterráneo.
Es fundamental la inversión en Murcia, en el campo de Lorca. Si ahí no hay
vías, el AVE en Almería será el tren hacia ninguna parte”.
El líder socialista advertía que “aún no existe una decisión
sobre cómo va a pasar el AVE por Lorca, si en superficie o soterrado, como
quieren los ciudadanos”.
Sánchez Teruel llamaba a la reflexión: “Es momento de dejar
a un lado intereses de partido, pensar en grande y trabajar en una
infraestructura fundamental para esta parte de España”.
A continuación, reprochaba a Rajoy ‘tirar’ para su tierra:
“El origen gallego del presidente y de la ministra de Fomento parece haber
hecho que las importantísimas cantidades que se han presupuestado durante estos
últimos cuatro años han tenido como objetivo que el AVE llegue a Galicia a
costa de que no lo haga a otras zonas como Almería”. Y añadió: “Todo ese dinero invertido en otras regiones se
podía haber planificado y compartido para que la alta velocidad llegara en una
fecha, pero no se ha hecho, y lo más grave es que hay partidas presupuestadas
que no se han ejecutado”.
Sobre la adjudicación del tramo entre Cuevas y Pulpí,
argumentaba que “haberlo contratado con una baja del 54% abre la puerta a que
la empresa adjudicataria emprenda un proceso de negociación para intentar subir
el presupuesto, lo que, como mínimo, supondrá un retraso considerable en el
inicio y terminación de las obras”.
Finalizaba su opinión el portavoz del PSOE con un
llamamiento al Partido Popular para que “gobierne quien gobierne, seamos
capaces de plantearnos un compromiso con la provincia a fin de que Almería esté
conectada con la alta velocidad cuanto antes. Es fundamental que exista una
línea que facilite que nuestros productos salgan de aquí y el turismo, otro
pilar básico de nuestra economía, llegue a esta parte de España. No hacerlo es
lastrar la competitividad de la comarca del Levante y del resto de la provincia
y, eso, es algo muy grave”.
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