Desde el esqueje hasta la extracción de aceite

‘Jarico’ cierra el ciclo de producción comprando la almazara de Huércal Overa

Javier Irigaray / 17·09·2015

Francisco Parra, gerente de ‘Grupo Jarico’, declaraba que “en el mundo del aceite, éste era el único eslabón de la cadena que nos quedaba por realizar. Nosotros plantamos fincas con árboles cuyos esquejes producimos en nuestros viveros, tenemos nuestras propias fincas y recolectamos nuestras aceitunas y las de los clientes. Ahora, tras comprar la almazara de Huércal Overa, produciremos nuestro propio aceite y, también, molturaremos el de quienes así lo deseen”.

La empresa cuevana ha adquirido, recientemente, la almazara de Huércal Overa, ya oficialmente denominada, ‘Almazara Óleo Jarico’.

‘Almazara Óleo Jarico’ abrirá sus puertas en octubre, para la próxima campaña. Su pretensión, según manifestaba Parra, es “comenzar la actividad para que los productores de aceituna de la zona puedan elaborar su aceite aquí”.

Explicaba el gerente del grupo que el tiempo que transcurre desde que se recolecta el fruto en el árbol, hasta que se traslada a la almazara para extraer el aceite, “es crucial para obtener un producto de máxima calidad. Con nuestra almazara, tienen la opción de moler antes su oliva y poder hacerlo sin tener la necesidad de desplazarse a

otras localidades”.

Tanto en Huércal-Overa como en toda la comarca del Levante almeriense existe una gran tradición en la producción de aceite de oliva virgen extra (AOVE). Las

características climatológicas de la zona hacen que sea un lugar ideal para el cultivo del olivar y su consecuencia es un oro líquido afrutado, suave, cada vez más reconocido por los consumidores de dentro y fuera de nuestras fronteras.

La ‘Almazara Óleo Jarico’ de Huércal Overa será una de las más modernas de la comarca. “Ahora estamos en pleno proceso de reforma para dotarla de un equipamiento que esté a la vanguardia, con la más moderna tecnología que hoy existe en el sector”.

El grupo familiar espera contar para este nuevo proyecto “con el mismo apoyo y

confianza que nuestros clientes han depositado en nosotros durante las últimas tres décadas”.

La producción de aceite en una almazara propia supone completar la cartera de servicios que se puede ofertar al sector del olivar. El gerente lo explicaba con un caso práctico: “Primero cultivamos la planta en nuestros propios viveros. Después, la trasladamos a la finca y la plantamos, llevamos el mantenimiento y el asesoramiento del cultivo, y después, si el cliente así lo demanda, también recolectamos la oliva con nuestros propios equipos”.

“Hasta el día de hoy –añadía- sólo nos faltaba completar ese proceso con la producción del aceite en nuestra propia almazara”. Por tanto, los clientes de Grupo Jarico ya pueden llevar a cabo todo el proceso productivo con la misma empresa. Desde el esqueje hasta la extracción de su propio aceite de oliva.

El grupo familiar Jarico lleva más de 30 años prestando sus servicios a empresas y particulares del sector agrario. Durante las últimas dos décadas se ha especializado en tecnología y desarrollo y asesoramiento del olivar.

En la actualidad, en sus instalaciones situadas en Las Canalejas -en el municipio de Cuevas del Almanzora-, comercializa plantas hortícolas y desarrolla la producción y venta de olivos. El ciclo completo lo cierra con la plantación de olivos y el servicio de mantenimiento y recolección de fincas, y sobre todo, ahora, con la producción de aceite en su propia almazara.

Pero, además de ese servicio a sus clientes, el ‘Grupo Jarico’ explota sus propias fincas repletas de olivos, según explicaba Parra. “Propios, en nuestras tierras, tenemos unos 500.000 olivos de la modalidad arbequina en espaldera, que producen alrededor de 300.000 litros de aceite”. Tal cantidad da para algo más de una tostada, por lo que el siguiente paso supondrá una vuelta de tuerca más en el negocio oleícola para la familia Parra. “Ahora –añadía el gerente- vamos a empezar a introducirnos en el mercado con nuestra propia marca ‘Óleo Jarico’”.

En la empresa tienen las ideas muy claras y no piensan hacer las cosas de cualquier manera. “Hemos decidido apostar por la elaboración de aceites de oliva virgen extra de alta gama y, también, por el ecológico, un modo de producción que nuestra fábrica nos permite trabajar. En el mundo que nos ha tocado vivir existe mucha y excelente competencia, por lo que es necesario optar por ofrecer calidad y otras alternativas a un mercado cada vez más exigente. No se trata de descubrir nada nuevo, sino todo lo contrario, procurar que el cliente elija nuestro aceite porque sea excelente”.

A la meta de la excelencia en calidad, el ‘Grupo Jarico’ añade la de conseguir una producción importante también en cuanto a la cantidad de aceituna molturada. “Además del fruto de nuestros olivos, ya tenemos acuerdos con otros agricultores de la comarca para procesar su aceituna, lo que nos permitirá, en esta primera campaña, producir alrededor de los cuatro millones de kilos. Ése es nuestro objetivo”.