“Los niveles más altos de microalgas se registraron sólo un día antes de abrir las playas”

Ecologistas en acción ha dado sus primeros pasos para constituirse en el Levante almeriense, una comarca en la que el Medio Ambiente tiene muchos asuntos abiertos por resolver y de eso hablamos con Marcos Diéguez, coordinador provincial de la asociación 'verde'

Marcos Diéguez

Inmaculada G. Mellado / 16·09·2015 

Los vertidos de aguas mal depuradas, la crisis de las microalgas o la radiactividad de Palomares son algunos de los asuntos que han movido a un grupo de vecinos a ponerse en contacto con Ecologistas en Acción para formar una asociación de defensa del medio ambiente en la comarca.

- ¿De dónde nace la intención de crear en el Levante una asociación conservacionista vinculada a Ecologistas en Acción?

- Hay personas de la comarca que se han puesto en contacto con nosotros para denunciar ciertas situaciones que se están dando en la zona, como que aún no se haya construido la depuradora de Antas tres años después de que fuera arrastrada por la riada; que las microalgas, al parecer, siguen provocando afecciones, aunque esté todo más calmado; o las sospechas sobre la actividad de Deretil… Son muchos temas distintos en los que a nosotros, desde Almería, nos resulta difícil trabajar; ahora, de la mano de estas personas nos hemos propuesto dar un paso más para abordar aquello que les preocupa y que también nos preocupa a nosotros.

El pasado 27 de agosto, en una reunión que se mantuvo en Vera, nos conocimos e intercambiamos opiniones sobre los asuntos más importantes, creando ya una previsión de trabajo continuado a partir de ahora.

- No hablamos sólo de naturaleza, porque cualquier ataque al medio ambiente puede acabar revertiendo en el hombre. Si se producen vertidos, por ejemplo, eso afectará al turismo, a la pesca…

- Efectivamente, ésa es nuestra preocupación. Lo primero es solucionar los problemas de las personas, y eso redundará en un beneficio para el medio ambiente. Nuestra prioridad es lo que preocupa a los habitantes. Además de los temas que he citado, hay otros más en los que se va a trabajar, como el de las bombas de Palomares. Son, en definitiva, problemas que afectan al ser humano y que tienen que ver con el respeto al medio ambiente. Nosotros queremos coordinar a esta gente que está interesada en estos asunto y atraer también a más personas. Cuantos más ojos tengamos mejor.

- De la denominación ‘Ecologistas en Acción’ es importante lo de acción. ¿Cuál será?

- Eso es. Nuestras líneas de actuación son básicamente dos. Una es la actividad tradicional, los movimientos conservacionistas, la oposición ante obras o infraestructuras que consideramos innecesarios. La otra vertiente, que intentamos fomentar y también se hará en el Levante, es la de aportar soluciones a través de la formación. No se trata de buscar sólo el enfrentamiento o la denuncia -que no vamos a dejar de hacerlo-, sino también poner en marcha actividades que creen conciencia entre la población. En otoño, por ejemplo, empezaremos a organizar limpiezas de playas y cauces, y otras más lúdicas para niños. Hay que acercar el respeto al medio ambiente a la gente.

- Usted ha aludido a la depuradora de Antas, pero hay otras dos, la de Huércal Overa y la de Los Lobos, que tampoco han sido reconstruidas tras las riadas, y eso que la Junta impone un canon para hacer obras hidráulicas.

- Es que no hay interés real por parte de la Administración en respetar la legalidad vigente. La UE obliga a depurar todas las aguas residuales. Además, las inversiones no son tan grandes, pero si tienes otras prioridades siempre irás posponiendo las depuradoras. El nuevo plan hidrológico de la cuenca mediterráneas andaluza, que ha estado en exposición pública a principios de este año, contempla obras faraónicas de interconexión de desaladoras –la de Carboneras con la del Almanzora y esas dos con El Ejido-. ¡Y son cientos de millones de euros! Y a eso se suma el arreglo de la desaladora de Palomares, también afectada por las lluvias, que nunca se ha usado pese a que costó 80 millones y ahora hay que inyectar otros 20 millones para su arreglo. Pero si se depurara bien no harían falta tantas desaladoras, porque se podría reutilizar el agua. Además, aquí las inversiones son ridículas, para la de Antas hablamos de un millones de euros. No tiene lógica.

Desde Ecologistas en Acción hemos presentado alegaciones a ese plan hidrológico porque no estamos de acuerdo.

- Tras los retrasos de la Junta e incluso con su oposición, el Ayuntamiento de Vera decidió hacer una depuradora propia y ya está reutilizando sus aguas residuales.

- Eso es lo que nosotros pretendemos, acciones reales y efectivas. Si es que  la directiva marco de aguas de la UE obliga a eso, a depurar plenamente las aguas residuales. Esto es un incumplimiento de la Junta y a veces también de los ayuntamientos en la parte que les corresponde. Es la Junta quien debe construir las depuradoras, por eso cobra un canon, pero el mantenimiento es del Ayuntamiento. Todas las administraciones tienen parte de culpa en que no se cumpla la legalidad.

- Cambiemos de asunto y hablemos de las microalgas. Llama la atención que las playas se abrieran no porque ya no había niveles elevados, sino porque no había afectados, cuando estaba prohibido bañarse e incluso acercarse.

- Es una paradoja. Desde Sanidad se dice que los análisis dieron los niveles más altos sólo un día antes de abrir. Ahí la administración tiene mucho que explicar y no se sabe todo lo que se debería saber. Nosotros pedimos que se colabore con grupos de investigación de otros lugares que están trabajando en esto para dar respuesta a los interrogantes, básicamente a por qué la concentración de algas no tiene que ver con reactividad.

Algunas de las personas asistentes a la reunión de Vera estaban preocupadas por este tema, dicen que todavía sigue habiendo síntomas y que aunque no es algo tan extendido, el problema no ha remitido.

Nosotros no tenemos fundamento para no creer la versión oficial, pero sí dudas sobre si la actividad de Deretil puede influir en estos episodios. Ahora bien, no podemos ni queremos acusar sin pruebas... Lo que sí sabemos es que Deretil contamina de forma legal, produciendo un gran impacto en la zona, por ejemplo en las praderas de posidonia, que están muertas. No lo digo yo, sino el ministerio de Medio Ambiente en el plan de gestión de los fondos marinos del Levante almeriense. A través de ese plan se van a intentar controlar los vertidos y ver la relación que pueden tener con la proliferación de algas y la reactividad en las personas.

Son muchas incógnitas las que hay con respecto a las microalgas y ni los investigadores pueden respondernos. Tenemos un foco en Villaricos, que parece que es recurrente y que podría servir para ahondar en el tema. Estamos ante un problema sanitario pero también económico. Nosotros hemos recibido decenas de correos electrónicos de turistas que nos preguntaban cómo estaba la zona de baño. No hemos querido echar leña al fuego. Pero tememos que vuelva a ocurrir el año que viene.

- Lo peor es eso, que los interrogantes dan alas a la imaginación.

- Claro, si no hay relación entre concentración de algas y reacción en las personas, cualquiera puede pensar que no son las microalgas. Que es el plutonio, Deretil, la depuradora de Palomares... Hay muchos factores y a lo mejor no hay una sola explicación. Si se produjese por los vertidos ocurriría en otros puntos de la provincia, de manera que aquí la única diferencia es la actividad industrial. Por eso hay rumores, que, eso sí, a veces no tienen fundamento.

- ¿Cuál es la postura de Ecologistas en Acción en relación a las miles de viviendas ilegales?

- Siempre hemos sido partidarios de que se respete la legalidad. Dicho esto, creemos los propietarios de buena fe que han sido engañados tienen que ser resarcidos. Deberían pedir, y nosotros nos sumaríamos a esa petición, responsabilidades penales a los políticos. Con respecto a la regularización, nos oponemos a que sea por decreto, hay que ver caso por caso. Si se regulariza la vivienda de quien construyó con permisos, qué pensará el de al lado que construyó con todos los parabienes. No hablamos de dejar a la gente en la calle, pero no creemos que todo pueda legalizarse.